Los jóvenes de hoy en día, y me incluyo, muchas veces admiramos y nos dejamos influenciar por figuras del entretenimiento. Pero ¿por qué no cambiar este fenómeno de adolescentes inmersos en la “cultura pop” y llevar nuestras miradas a otros temas?. No pretendo demeritar la cultura de hoy en día, al contrario, hago parte de ella, y la verdad no me quejo, pero siendo objetiva, ¿realmente estoy aprovechando mi tiempo?. Facebook (al menos el mío) esta lleno de publicaciones de Tasty, Insider, Billboard, Vogue, noticias y memes, donde la mayoría de la historias son de celebridades y de la nueva pareja del momento. Es verdad que soy la primera en dar “me gusta” al nuevo post de Justin Bieber y me emociono cuando se acerca el VS Fashion Show, pero nada de esto es realmente importante. El problema es que los temas de verdadera importancia son tan deprimentes que preferimos distraernos con historias y situaciones banales que no nos permiten ir más allá, pero ¿más allá de qué?. Hoy en día el mundo está de cabeza: la sobrepoblación, el terrorismo, las armas nucleares, el calentamiento global, la deforestación, refugiados en todo el mundo, desastres naturales, muertes cada día y muchas situaciones terribles que nos muestran los errores que ha cometido la humanidad y nos desalientan. Precisamente por esto es que debemos prestar atención a estos temas que, aunque suenen aburridos ¿de verdad pueden ser más aburridos que ver las ultimas fotos de Gigi Hadid con Zayn Malik? Sin embargo, podemos generar un buen cambio y no todo es deprimente como parece, pues en los pequeños detalles podemos encontrar cosas muy valiosas que nos influencian a ser mejores personas y a trabajar para que cada día seamos mas consientes de nuestros errores. Tengo grandes expectativas de que lograremos encontrar un balance entre las distracciones y los asuntos que deberían importarnos (porque no todo tiene que ser serio), y que cada vez más nos preocuparemos más por cuidar a los animales y la naturaleza, por tratarnos mejor entre nosotros, por esforzarnos en nuestra educación y por cuidar nuestra salud física y mental.
Redactado por: Sara Karissa Matus.